Expedición de Alan Estrada perdió comunicación por casi una hora cuando bajo al Titanic

El submarino de “OceaneGate Expeditions” se encontraba a 2 mil metros de profundidad cuando el piloto comenzó un protocolo para salvar la vida de todos los tripulantes

La empresa OceaneGate Expeditions  reportó la desaparición de su submarino Titán el pasado lunes 19 de junio. De acuerdo con un comunicado oficial que difundió la empresa, después de aproximadamente una hora de comenzar el descenso se perdió comunicación con la tripulación integrada por cinco pasajeros: Hamish Harding, Shahzada Dawood, Suleman Dawood, Paul-Henri Nargeolet y Stockton Rush.

Hasta la mañana de este miércoles 21 de mayo (hora centro de México) se desconoce el paradero del medio de transporte único en su tipo y su tripulación. Cabe mencionar que según la compañía, el submarino cuenta con96 horas de oxígeno, mismas que comenzaron a correr en cuando comenzó el descenso de la unidad.

La desaparición del submarino ha conmocionado al mundo entero, pues aunque sus viajes comenzaron hace varios años, recientemente llamaron la atención las cláusulas del contrato que deben firmar los tripulantes antes de descender en las profundidades del mar. Y es que hay una sección donde se explica cuál sería el protocolo a seguir en dado caso de perder comunicación con el exterior o algún incidente de riesgo.

Tripulación de Alan Estrada perdió comunicación cerca de una hora

Muy pocas personas tuvieron la oportunidad de viajar a las profundidades del mar para ver los restos del Titanic, el trasatlántico más famosos del mundo que se hundió en abril de 1912 durante su primer viaje. Entre los afortunados destaca Alan Estrada, quien durante su descenso junto al piloto Scott Griffith, co-piloto PH Nargeolet y los turistas Ron y Chelse pasó momentos de terror porque el submarino perdió comunicación durante más de una hora.

De acuerdo con el documental del artista mexicano disponible en YouTube, ya habían descendido más de 1,000 metros de profundidad cuando el piloto notó inconsistencias: “No tengo recepción en este. Es raro porque tengo algunas lecturas, pero no tengo comunicación”.

Alan Estrada explicó que: “Es vital que podamos comunicarnos con la superficie, pues de otra manera podemos perdernos y quedar a la deriva en medio del océano”. Mientras el piloto intentaba restablecer contacto con sus compañeros en el exterior, los tripulantes se mantenían a la expectativa.

“Un último intento”, comentó el piloto Griffith. Para ese momento, Titán ya se encontraba a 2 mil metros de profundidad y los riesgos de continuar sin comunicación con el exterior eran cada vez más grandes, así que los dirigentes tuvieron que comenzar un protocolo que consistía en interrumpir el descenso para poder regresar a la superficie con seguridad.

Mariana Martinez

Mariana Martinez

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