En tiempos de gran preocupación, muchas personas recurren a Dios. Pero algunos fieles que esperaban la intervención divina para solucionar la crisis de Covid-19 podrían no tener suerte.
En Lipetsk, a unos 400 km de Moscú, en Rusia, se canceló una procesión religiosa para alejar a Covid-19 por la razón exacta por la que se planeó, debido al virus.
Los devotos cristianos de la ciudad se decepcionaron al descubrir que su ceremonia planificada se abandonó debido al estricto régimen de cuarentena de Lipetsk.
El 11 de marzo, se introdujeron reglas para combatir la propagación del coronavirus.
Al igual que en otras ciudades rusas, como Moscú, se prohibieron las reuniones masivas de más de un cierto número de personas hasta nuevo aviso.
El organizador de la procesión y jefe de la comunidad de Lipetsk de los Santos Mártires Reales, el teniente coronel Yuri Bernikov, anunció que las oraciones por los afligidos tendrían que tener lugar en otro lugar.
“En Lipetsk, debido a la prohibición de todos los eventos públicos, el akathist [un tipo de oración ortodoxa] el 15 de marzo se cancela. Te pedimos, al mismo tiempo, que leas oraciones contra el coronavirus”, escribió Bernikov.
Lipetsk tiene tres casos confirmados de Covid-19, una mujer y una pareja casada que regresaron de unas vacaciones en Italia.
En respuesta, el gobernador regional Igor Artamonov decidió cerrar todas las escuelas y colegios por dos semanas.
