Los líderes de la Unión Europea (UE) acordaron prohibir el ingreso de extranjeros al bloque de 27 países durante 30 días para desalentar la propagación del coronavirus.
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE, aseguró que la propuesta recibió el apoyo de los estados miembros y que ahora “depende de ellos implementarlo”.
Por su parte, la canciller alemana Angela Merkel aseguró que acordaron la propuesta de la Comisión de prohibir la entrada con “excepciones muy limitadas”. La funcionaria agregó que los ciudadanos de Suiza, Liechtenstein, el Reino Unido y Noruega están exentos. Además, acordaron coordinar la repatriación de los ciudadanos de la UE varados fuera del bloque.
La decisión se estableció durante la segunda cumbre extraordinaria que hubo en las últimas dos semanas donde se evaluaron las medidas a tomar ante el coronavirus. Europa se transformó en el epicentro de la lucha contra una enfermedad que ya dejó más de 7000 muertos en todo el mundo.
El inexorable avance del Covid-19, además, sacudió las economías del mundo y hundió a los mercados, que vienen registrando bajas históricas. Frente a la paranoia y la extensión del coronavirus, los diferentes gobiernos de la UE introdujeron medidas extremas, como cuarentenas o cierres parciales de fronteras, sin demasiadas consultas dentro del interbloque.
Frente a la crisis de Italia, Francia y España, que se convirtieron en los países con más muertos e infectados luego de China, la UE tomó una iniciativa en conjunto para aunar criterios e intentar lograr lo mismo que el gigante asiático: frenar el número de contagios.
El objetivo de las medidas anunciadas es reducir los movimientos innecesarios, pero al mismo tiempo asegurar el movimiento de mercancías y de bienes para que garantizar tanto como sea posible la integridad del mercado único.
