El pasado 2 de abril se celebró el Día Mundial de la toma de conciencia sobre el Autismo. Organizaciones dedicadas al tratamiento del TEA (Trastorno del Espectro Autista) difundieron una serie de recomendaciones acerca de cómo ayudar a los niños con autismo durante la cuarentena.
La cuarentena impuesta por la aparición de la pandemia del COVID-19 es de por sí una situación difícil para todas las familias. Pero, para aquellas que tienen entre sus integrantes a un niño o una niña autista es más difícil aún, por las características mismas de este trastorno.
Trastorno del Espectro Autista
Antes de avanzar sobre las recomendaciones para ayudar a los niños con autismo durante la cuarentena, es conveniente definir qué es el TEA. Se trata de un trastorno neurobiológico del desarrollo. Afecta a la habilidad cerebral para desarrollar y mantener habilidades sociales y de comunicación.
El TEA normalmente se manifiesta durante los primeros años de vida; en general, antes de los 3 años. La afectación de las habilidades sociales y comunicacionales se evidencia en un marcado trastorno de la conducta y dificultades para relacionarse con el entorno.
En resumen, las personas con TEA suelen tener pocas destrezas sociales, emocionales y comunicacionales. Es por ello que, ante la situación emergente del aislamiento obligatorio y el encierro que esta implica, es indispensable cuidar de manera particular las personas con autismo durante la cuarentena.
Su condición les vuelve más vulnerables que al resto y dependen permanentemente de atención especializada, la cual puede faltarles ahora. Veamos cómo podemos ayudarles.
Autismo durante la cuarentena
Para las personas con TEA, las rutinas son fundamentales. Es por ello que el cierre de colegios, lugares de trabajo, centros de atención médica y demás significa un golpe muy duro para ellos. Estas son maneras de ordenar su vida diaria rutinariamente y de contenerlos de forma efectiva.
El autismo durante la cuarentena puede llegar a tornarse especialmente difícil en el caso de los niños. El trastorno en sí es muy heterogéneo y, por eso, durante este período de encierro hay quienes lo toleran sin problemas y quienes se exasperan, alteran o deprimen.
Frente a esta realidad, algunos gobiernos han emitido autorizaciones excepcionales para las personas autistas y los familiares que están a su cuidado, para que hagan salidas al exterior de sus casas. Se trata de paseos cortos, con fines terapéuticos, cuyo objetivo es cuidar a estas personas.
Cada país ofrece variantes para estos permisos, pero en general basta con poder acreditar la condición de TEA de la persona beneficiada, portando certificados de discapacidad. Además, a nivel mundial se recomienda llevar un lazo azul o insignia de este color. Esto ayuda a las demás personas a identificarles como autistas.
Niños y niñas autistas frente a la pandemia
Con las escuelas cerradas, los centros de atención solamente con guardias mínimas y la casi imposibilidad de ir a sitios públicos o de salir a pasear, las familias que en su seno tienen a niños o niñas con TEA, se han preguntado: ¿cómo ayudar a sus menores con autismo durante la cuarentena?
Muchas organizaciones han dado respuesta a esta pregunta. Una de las recomendaciones en la que coinciden es la de crear rutinas que les ayuden a ordenar la vida diaria. Destaca la importancia de tener horarios preestablecidos, pues las personas autistas necesitan predictibilidad, claridad y anticipación de sucesos, lo que reduce la ansiedad.
Otra pauta es la de hablar sobre lo que está pasando. Es tranquilizador para los niños saber de qué se trata la cuarentena, cuánto va a durar, cómo cuidarse y por qué hacerlo. Para ello, se puede acudir al apoyo audiovisual, libros, diarios o una conversación adecuada con sus familiares.
Otras recomendaciones sobre el autismo durante la cuarentena
Además de informarles sobre lo que sucede, es fundamental transmitirles tranquilidad. El mensaje debe ser claro, simple, con la información justa y siempre basándose en fuentes fiables. Es importante mantener la calma y evitar la angustia o el estrés.
Por último, lo ideal es que las personas que cuidan a menores con autismo durante la cuarentena se cuiden también. Esto permite crear nuevas rutinas, trasmitir información y tranquilidad y dedicar tiempos al placer de estar juntos, que siempre es una forma de cuidar a las personas más vulnerables.
